"Esto surgió por una idea y un análisis en primera medida de Jeremías Butto y el Intendente Javier Meyer, en una charla que tuvieron se analizaron distintos escenarios de contagios, y posible progresión de la enfermedad tanto en Las Rosas como en ciudades vecinas, vimos que las grandes deficiencias que tienen estos pueblos son los respiradores, porque en el momento de que existan contagios y requieran ser atendidos, en grandes ciudades van a estar pasando lo mismo, y los enfermos de nuestra ciudad no iban a poder ser atendidos ahí, por eso se resolvió que la única alternativa en la que podemos aportar, en la cual podíamos aportar era ver si en un plazo corto podíamos hacer un respirador, fabricado con medios industriales, y que sirva solo con el fin de tratar esta enfermedad", comento Moriconi.